The Host

• Datos técnicos: Corea del Sur. 2006. Director: Bong Joon-ho. Intérpretes: Song Kang-ho, Byeon Heui-bong, Park Hae-il, Bae Du-na.
• Argumento: Los habitantes de Seúl observan sorprendidos un extraño objeto que cuelga de un puente sobre el río Han. El objeto es, en realidad, una monstruosa criatura mutante que al despertar devora a todo aquel que se cruza en su camino. Entre tanta destrucción, la criatura mutante rapta a la hija del dueño de un kiosco de comida a la orilla del río. Mientras el ejército fracasa una y otra vez en la destrucción del monstruo, este hombrecillo anónimo y su familia intentan recuperar a su hija...
• Mi opinión: me ha costado decidirme a ver esta película por dos razones bien diferentes. La primera, que la mayoría de películas sobre monstruos y más orientales (véase "Godzilla", etc.) suelen resultar muy decepcionantes, con muñecones gigantes menos creíbles que el Marshmallow de los "Cazafantasmas". La segunda es casi la contraria, esto es, que las películas con monstruos buenas, como "Tiburón", "Alien", "La cosa" (magnífico filme de Carpenter que me atreví a ver hace muy poco y que recomiendo como uno de los más aterradores de este género) son precisamente terroríficas, para mí mucho más que cualquiera sobre fantasmas, muertos, vísceras, sangre... Y a pensar de estos recelos previos, he de reconocer que me ha satisfecho. Tal vez se deba a la marca propia del director, que logra filmar una película de terror muy inusual, en la que se mezclan a partes iguales intriga, drama, comedia de situación, crítica social y política, humor negro... una película en la que salta con brillantez de la risa a la angustia, de la conmoción a la burla. Otro de los grandes aciertos de la película es focalizar la lucha contra el monstruo en un núcleo familiar, un grupo reducido de cuatro personas comunes que no tienen desperdicio y que se dan cuenta de que la única forma de vencer es permanecer unidos. Esto, al igual que ocurre en "La guerra de los mundos" de Steven Spielberg, los personajes crean un vínculo más cercano con el espectador, ya que nos resulta mucho más fácil empatizar con un patético padre soltero de mediana edad que con un presidente de los Estados Unidos que en su juventud ha sido marine-ranger-pilotodecombate-boyscout, no nos engañemos. Así, las interpretaciones tanto de Song Kang-ho (desternillante en su papel de paterfamilias algo retrasado) como de la joven Ah-sung Ko (valiente, enternecedora, que le valió el reconocimiento como artista revelación) son un auténtico lujo. En resumen, una película que es mucho más de lo que parece a primera vista, con una de los monstruos más reales y aterradores de los últimos años, probablemente porque es como la vida misma: miedo, amor y risa mezclados a partes iguales. 
• Recomendaciones: buena película para descubrir a Bong Joon-ho, uno de los jóvenes realizadores surcoreanos más interesantes. Palomitas y a pasarlo bien!